Un grupo de ocho niños, evacuados de Londres durante la Segunda Guerra Mundial y acompañados por la directora Jean Hogg y la joven maestra Eve Parkins, llegan a Crythin Gifford, un pueblo rural abandonado. Su destino es la casa Eel Marsh, ahora en ruinas. Su presencia despierta una fuerza malévola que durante décadas ha mantenido embrujado el edificio.