Una madre angustiada y sus dos hijos gemelos han creado una vida aislada en una cabaña en medio del bosque, constantemente acechados por un espíritu maligno. Para protegerse, deben permanecer siempre conectados físicamente, llegando al punto de atarse con cuerdas para no separarse. Sin embargo, la tensa convivencia se pone en peligro cuando uno de los niños empieza a dudar de la existencia del mal, desencadenando una serie de acontecimientos que rompen los frágiles vínculos que los mantienen unidos.