La cinta sigue al Dr. Louis Creed (Jason Clarke), quien, luego de mudarse con su esposa Rachel (Amy Seimetz) y sus dos hijos pequeños de Boston a Maine rural, descubre un cementerio misterioso escondido en el bosque cerca del nuevo hogar de la familia. Cuando ocurre una tragedia, Louis recurre a su inusual vecino, Jud Crandall (John Lithgow), provocando una peligrosa reacción en cadena que desata un mal insondable con horribles consecuencias.