Las hostilidades se desarrolla en Santa Lucía, un lugar donde la violencia y el índice de criminalidad han aumentado considerablemente en los últimos años. El director y cinefotógrafo, M. Sebastián Molina, retrata la forma en que su familia y los locales del pueblo soportan los persistentes cambios en su estilo de vida. A través de los ojos de los primos del director, Israel y Omar, experimentamos la melancólica reminiscencia de un espacio que parece estático pero que ha cambiado drásticamente.